La importancia de compartir rápidamente los conocimientos en la era del COVID-19
El flujo del conocimiento científico es esencial para poder poner a disposición de todos los investigadores los últimos avances y descubrimientos.
Todos los artículos científicos, para garantizar al máximo su calidad y rigor, son enviados a revistas científicas donde son evaluados por otros expertos antes de aprobar su publicación. Los artículos publicados son accesibles desde bases de datos a las que acceden los investigadores de todo el mundo para buscar estudios o artículos que les puedan resultar de interés.
En esta época en la que se está investigando contra reloj para avanzar lo más rápido posible en los tratamientos y vacunas contra el virus SARS-CoV-19, el causante de la epidemia de COVID19, es fundamental que los avances se publiquen, compartan y difundan lo más rápido posible. Para ello, numerosas revistas y grupos editoriales han firmado un acuerdo por el cual, durante esta epidemia, se tomarán medidas de emergencia para que el conocimiento fluya a toda velocidad.
Aquí se pude leer el acuerdo:
Sharing research data and findings relevant to the novel coronavirus (COVID-19) outbreak |
Entre las medidas más importantes, encontramos que todos los avances se harán llegar inmediatamente a la Organización Mundial de la Salud, y los investigadores e instituciones no deberán pagar por la descarga de los artículos. También se colgarán los avances científicos en portales de prepublicación, donde se podrán consultar los datos incluso antes de que las revistas lleguen a publicarlos.
Gracias a esta y muchas otras iniciativas de investigación, se está logrando que conozcamos detalles del virus y estén apareciendo oportunidades de tratamiento en un tiempo récord. Se trata de un esfuerzo impresionante que, una vez más, muestra que gracias a la investigación se pueden derrotar las amenazas sanitarias más complicadas.