El grupo de investigación del Dr. Quintela Fandiño, que cuenta desde hace 4 años con apoyo de CRIS, lleva tiempo trabajando en métodos avanzados para combatir el cáncer de mama.
Uno de los focos más activos de su investigación es FASN, un grupo de proteínas que son capaces de sintetizar ácidos grasos utilizando parte del combustible que mantiene el funcionamiento de la célula. Generalmente, salvo en ocasiones de alta demanda de ácidos grasos, las células no necesitan que FASN funcione, porque consiguen los ácidos grasos del torrente sanguíneo.
A diferencia de las células sanas, muchos tumores parecen tener niveles altos de FASN, por lo que durante muchos años se ha sospechado que podría ser importante en el desarrollo del cáncer. ¿Qué ocurriría si atacásemos FASN? Curiosamente, cuando se ha intentado evaluar si los compuestos contra FASN combatían tumores establecidos, los resultados hasta ahora han sido bastante modestos. ¿Significa esto que FASN no tiene relevancia en el cáncer? Quizá la falta de resultados positivos se deriva de que no estábamos buscando en el momento correcto: FASN podría ser esencial en los pasos iniciales de la formación de los tumores, no tanto cuando ya están establecidos.
Utilizando modelos animales de ratones que desarrollan tumores de mama, el equipo del Dr. Quintela ha podido demostrar que cuando las células no tienen FASN no son capaces de crecer unas encima de otras, en 3 dimensiones. La capacidad de amontonarse y crecer en aglomerados es una de las características de los tumores. Por lo tanto, las células sin FASN no son capaces de iniciar este paso fundamental en el desarrollo del cáncer.
El mecanismo por el que ocurre esto es muy interesante:
Cuando las células crecen normalmente, en 2D, lo hacen sobre un soporte llamado matriz extracelular. Cuando empiezan a crecer unas encima de otras, las que están encima pierden el contacto con esta matriz. Esto les hace acumular un montón de subproductos tóxicos llamados radicales libres (ROS), que al acumularse dañan la célula y causan su muerte. Por lo tanto, en condiciones normales, las células no pueden crecer unas encima de otras porque se mueren por acumulación de radicales libres.
Sin embargo FASN es capaz de evitar esta acumulación de radicales libres. Al no acumular radicales libres, las células que crecen en 3D, amontonadas y desordenadas, pueden crecer sin temor a morir. Por esta razón, si eliminamos FASN, las células acumulan son incapaces de crecer de esta manera (en 3d), y por ende, no se pueden desarrollar tumores. De hecho, los ratones en los cuales se elimina FASN no llegan a desarrollar tumores.
Estos datos tienen muchísima importancia en la prevención del cáncer de mama: Este hallazgo tendrá mucha relevancia a la hora de desarrollar futuros tratamientos contra la metástasis, y para elaborar sistemas de prevención en poblaciones con alto riesgo de desarrollar tumores.